HOFBURG Y SU BALCON MALDITO

Austria tiene una particular historia de amor-odio con Alemania. En ausencia de ésta, en el siglo XIX, formó parte sucesivamente, con Prusia y otros Estados alemanes, de la  Confederación del Rin o Rheinbund (1806-1813) -bajo hegemonía napoleónica-; la Confederación Germánica o Deutscher Bund (1815-1866) , ya bajo la Santa Alianza, entrando luego en guerra con aquélla y tras un cierto distanciamiento, en el siglo XX, siendo anexada vía el Anschluss a la Alemania nazi, cuyo Führer nació en un pueblito alpino austríaco. Tras haber compartido un lúgubre destino común, con ejércitos de ocupación americano y soviético hasta 1955, Austria logró su independencia, a costa de su neutralidad en la Guerra Fría y hoy, en el seno de la Unión Europea, Sebastian Kurz se alinea casi al unísono con Frau Angela Merkel, incluso en la lucha contra la pandemia.

En la entrada central a la Plaza de los Héroes donde se halla el Palacio

Del fragmento olvidable de la historia, es decir, el nazismo, todavía quedan retazos. En marzo último, la Directora de la Casa de la Historia de Austria, pidió que se reabra al público, el balcón del Palacio de Hofburg, donde Hitler diera su célebre discurso del 15 de marzo de 1938, ante 200.000 personas. El mismo es arquitectónicamente más similar a una terraza, ya que se encuentra directamente encima de una entrada cubierta que conduce al palacio desde la Plaza de los Héroes (en alemán, Heldenplatz), un sitio de manifestaciones políticas y reuniones, tanto pasadas como presentes.

Vieja fortaleza militar del siglo XVIII, restaurada como Palacio en 1847, es uno de los tres más famosos -junto con Schönbrunn y Belvedere- que tiene Viena y uno de los tantos que usaron los Habsburgo, la familia real austríaca -cogobernante de la España imperial- en el pasado. También es el más grande y el más antiguo, habiendo tenido como inquilinos célebres previos a Hitler, a Francisco José I y su esposa Isabel de Baviera, más conocida como “Sissí”. Mucho más fugaz fue la estancia del Zar de todas las Rusias, Alejandro I, quien se hospedó allí durante el histórico Congreso de Viena de 1815.

Estatua en honor al Archiduque Carlos de Habsburgo-Lorena (Habsburg-Lothringen). Carlos fue Generalísimo del Ejército austríaco, el mayor rival de Napoleón y comparable a Wellesley.

Volviendo al episodio de la apertura del balcón de Hitler, remite una vez al pasado, el mismo que del que Austria se ha hecho cargo, por sus complicidades con el nazismo alemán. Su República actual está entretenida con otros quehaceres más pueriles, si se me permite el término, como el asilo o no, a refugiados afganos pero como se ve, esa especial relación de pocos años con el totalitarismo nazi, vuelve una y otra vez, a impactar, por el peso de la memoria histórica.

Estos carteles alegóricos a la democracia liberal, ubicados en plena Heldenplatz, testimonian la legitimación republicana de la que hace gala Austria día a día, tratando de enterrar para siempre, aquellos años malditos de fines de la década del treinta, aunque pueda haber todavía hoy disidencias respecto a cómo hacerlo.

NEDERLANDESES CON SU MIRADA EN EL MUNDO

Países Bajos es un país fantástico, caracterizado por la tenacidad de sus habitantes, su pluralismo y tolerancia religiosa y su adhesión al capitalismo desde tiempos tempranos de la Edad Moderna. Aquél carácter de su población tiene relación con el temple demostrado en no pocas ocasiones, pero sobre todo, siendo un país tan pequeño, que desde el aire se visualiza verde, pero rodeado o penetrado por el Mar del Norte, con esa capacidad para salir del encierro y explorar nuevos mundos.

En efecto, los nederlandeses han sido extraordinarios navegantes, particularmente, por razones de supervivencia, no de conquista, como otros pueblos. Intentaban llegar a las Indias Orientales en el siglo XVI para romper el cerco y dominación española, con su catolicismo contrarreformista y papista, que a los holandesdes les parecía tan recalcitratemente conservador e inmovilizante.

Varios intentos en tal sentido, provocaron marinos de la talla de Willem Barents y Jacob Van Heemskerk, quienes se aventuraron a proyectar más allá de lo conocido, sus ambiciones marítimas. Obraba como un factor estimulante, la prédica de reverendos protestantes como Petrus Plancius, quien además, era cartógrafo y astrónomo. Sobre las postrimerías del siglo XVI, un siglo después que el gran descubrimiento de América por parte del genovés Cristóbal Colón, entre 1596 y 1597, Jan Cornelius Rijp y el citado Van Heemskerk -llevando a Barents- se aventuraron a navegar hacia el norte de Holanda, para descubrir “la ruta del noreste” a las Indias Orientales, acortando la distancia a China.

La expedición de dos barcos fracasó, pues terminó con uno de ellos, el conducido por Van Heemskerk, enterrado en el hielo y por ello, los marinos debieron soportar un muy crudo invierno en Nueva Zembla  (en ruso, “Novaya Zemlya“), en una caseta de madera que ellos mismos, con el mismo material del barco, improvisaron y calefaccionaron a su manera, llamándola “El hogar seguro” (en nederlandés, “Het Behouden Huys”).

Como es de imaginar, las condiciones era infrahumanas: los marineros racionaban la comida, la cerveza guardada en toneles se congelaba y destruía y apenas podían cazar y comer zorros árticos. El escorbuto hacía estragos además de la exposición al congelamiento. Barents moriría allí el 20 de junio de 1597, aunque se ignora si fue arrojado al mar o yace en esas lejanas tierras. Su sueño lo lograría el explorador sueco-finés Adolf Erik Nordenskiöld, quien descubriría el tan ansiado “pasaje del noreste” entre 1878 y 1880.

Pudimos conocer dicha azarosa aventura, gracias a las memorias escritas y publicadas en 1598, por el carpintero de uno de los dos barcos, Gerrit de Veer, quien pudo sobrevivir a tales peripecias. Era uno de los -apenas- doce que pudieron regresar a Amsterdam y el primer testigo reconocido en ver el efecto llamado Nueva Zembla, es decir, una suerte de anomalía de la atmósfera, en forma de espejismo polar, causado por la refracción de la luz solar entre las termoclinas atmosféricas. El libro de De Veer fue el primer best-seller mundial y elevó la autoestima y orgullo de ese pueblo productor de quesos y tulipanes, a niveles insospechados.

El pasado martes cuando estuve varias horas en el majestuoso Aeropuerto Internacional de Schiphol, en Amsterdam, mientras esperaba mi vuelo de KLM de regreso a Buenos Aires, recordé esa experiencia. Como la ley de atracción existe, mientras retornaba por los aires, me puse a ver la película “Nova Zembla”, estrenada en 2011, que narra la historia de esa última expedición de Barents.

Schiphol, Barents, KLM y Nueva Zembla son sinónimos de mirada global, de empuje y tesón, de vocación para traspasar límites. Enhorabuena que este osado pueblo nederlandés todavía se arriesgue a ello, como hace siglos y por eso, es digno de mi gran admiración.

PARALELISMO DE DOS PAISES QUE EMPIEZAN CON “A”

Me preguntan que asemeja y qué diferencia a #Argentina y #Austria?

En principio, los iguala la globalización y por lo pronto, la fecha de elecciones (en noviembre). Luego, hay varias distinciones. No sólo que el segundo está poblado originariamente por germanos (campesinos y conservadores) mientras el primero, por mestizos, aunque ambos tuvieron grandes oleadas de inmigrantes cuando mejor les fue: Austria, ahora, desarrollada, con un generoso Estado Benefactor, miembro de la #UE y la #OTAN, atractiva para sirios, afganos, kurdos, iraníes, balcánicos, africanos, etc.; Argentina, en la segunda mitad del siglo XIX, cuando recibió el récord de 6 millones de inmigrantes, preferentemente europeos.

Hay otras singularidades, a pesar de que te podés encontrar en el bus, una joven argentina, mendocina, tatuada, con su pelo teñido de violeta. que hace más de un año, deambula por Austria, eso sí, acompañada por un valenciano, estudiando Anatomía Patológica (Medicina) y ahora intentando entrar en Ingeniería, aunque antes debe rendir el nivel básico de alemán. Argentina es en grande, como esa joven. Está perdida, sin brújula. Austria es ordenada, organizada, todo funciona, no hay ruidos en su capital (Viena), excepto alguna ambulancia, autobomba o coche policial persiguiendo drogadictos en la costa baja de los canales del #Danubio (Donau).

En Viena, la ciudad con mejor nivel de vida de #Europa, donde gobiernan los socialistas hace 102 años, invictos en todas las elecciones, todo está limpio, impecable, sin grito alguno, la sociedad es homogénea y obediente pero responsable, no hay pobres en las calles, excepto algunos borrachos noctámbulos aislados. Los únicos diferentes son los refugiados e inmigrantes recientes de la última década, cuando aprisionados en #Turquía y #Grecia, se fueron viniendo al norte, recalando masivamente aquí, porque es el paso previo -y más accesible- que #Alemania.

En este país de Europa Central, lindero y tan afín a esa primera potencia europea (Alemania), los políticos no son profesionales: tienen vocación de servicio, están encuadrados ideológica y partidariamente -hay disciplina en tal sentido-, sujetos a códigos especiales y como no deben vivir de la política, o del #Estado, o del dinero de los contribuyentes, las propias empresas, sobre todo, las de seguros, los emplean. Sí, aquí los políticos se dedican a vender seguros: no entran a los directorios de las compañías para hacer lobbying en favor de sus intereses.

Como ya hemos visto, en una entrega anterior, el Presidente Van Der Bellen, por ejemplo, pasea todas las mañanas por el #Arenbergpark como un jubilado más o, concurre a su trabajo, en metro.

Respecto a temas de la agenda política, en vísperas de elecciones, el gran problema de los últimos años, es que han proliferado las ayudas a los refugiados e inmigrantes iraquíes, afganos y sirios -los más cultos de todos, igual que los iraníes-, con sólo llenar formularios y obligarse a aprender el alemán. Ello ha despertado inquietud y rechazo por parte de la población austríaca autóctona pero también de los inmigrantes de los ochenta y noventa, quienes han pagado ya un “enorme derecho de piso”, razón por la cual se enrolan en las filas del #FPÖ (Partido de la #Libertad), el viejo partido de Jörg #Haider, uno de los primeros dirigentes derechistas que tuvo #Europa, trágicamente desaparecido en 2008, tras haber sido gobernador del Estado de #Carintia (vecino a #Eslovenia).

Tuvimos la suerte de asistir a uno de los primeros actos políticos del #FPÖ (Partido de la #Libertad), agrupación de derecha conservadora-liberal, tercera fuerza nacional detrás de los socialistas y la coalición gobernante democristiana (conservadora-popular)-ecologista (izquierda actual). Fue en un distrito alejado de la ciudad de Viena, el 22, llamado Donaustadt -donde naciera el gran futbolista austríaco (negro) David Alaba-, pero el tercero más importante por su nivel de ingresos. En un bar al aire libre, con la sombra de los árboles, en lugar de choripán y una Coca Cola, les daban a los asistentes, casi todos, de mediana edad, blancos nativos y canosos, la tradicional salchicha (picante, para mi gusto), en un pebete vienés y un jugo de manzana.

Los discursos de Angela Schütz -la nieta del gran sociólogo austríaco Alfred Schütz, discípulo de la Fenomenología de Hüsserl y ex compañero de estudios de Mises y Hayek- y el candidato a concejal Maximilian Krauss, incitaban a los aplausos de los presentes, sobre todo, cuando se proponía pagarles boleto de regreso a los últimos inmigrantes. Conste que este acto se desarrolló unos días antes de la caída de Kabul, capital de Afganistán, lo cual podría generar otra oleada humanitaria hacia estas tierras, de la magnitud que tuvieron los austríacos con la guerra de Balcanes en los noventa y la crisis siria en 2015.

Qué objeta particularmente -y con alguna razón- la derecha austríaca en relación a los refugiados? Que por ejemplo, los refugiados provenientes de Afganistán son trasladados en helicópteros o aviones de la Fuerza Aérea Austríaca, financiados con el dinero de los contribuyentes austríacos. Allí nace una segunda objeción: “quien abandona su hogar para estar cómodo en nuestro Seguro Social no necesita protección, sobre todo si luego visita su país para irse de vacaciones a casa”. Agrego yo, en función del carácter gregario o colectivista de sus entornos familiares, hasta son portadores irresponsables del virus Covid-19, cada vez que van y vienen de sus tierras natales, por ejemplo, los balcánicos.

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VIENA Y SUS CONTRASTES

En el Arenbergpark de la majestuosa capital austríaca, podemos encontrarnos una mañana cualquiera sentado en un banco, a un anciano dándole de comer a las palomas -o a los cuervos, omnipresentes por la cercanía con el verdoso -no azul- Río Danubio (el Donau, en idioma alemán).

Es nada más ni nada menos que el Presidente Federal del país, Alexander Van der Bellen (77 años).

Por cierto, no podría imaginar algún primer mandatario latinoamericano y mucho menos, argentino, que adoptara ese tipo de conductas, incluyendo viajar en metro o en tren, como si fuera un ciudadano común más. En realidad, lo es aunque, independientemente de ese cargo que ostenta hace apenas cuatro años, algo más que simbólico o protocolar como en todo semiparlamentarismo, los gobernantes austríacos no gozan de privilegios especiales, viven en sus domicilios particulares, no tienen autos con choferes ni son mirados por la población, como príncipes o virreyes, con algún “derecho divino”, sino como simples servidores públicos, sin mayor distancia que la que guarda Van der Bellen con sus vecinos vieneses en el subte o el parque.

Foto tomada del Wiener Linien, 2019.

Más reciente, en plena pandemia, 2020.

Sin embargo, en el mismo parque al que suele concurrir el Presidente, profesor universitario (de Economía) y dirigente ecologista Van der Bellen, sorprenden erguidas dos moles de cemento, cerradas, tenebrosas, que impactan mucho más al estar rodeadas de verde, plantas, árboles, pájaros y hasta simpáticas ardillas, con un bar un poco más allá de ambas. Al lado de las mismas, incluso, hay una cancha de básquet -o fútbol cinco-, con piso de mosaico, donde juegan chicos propios del multiculturalismo de este país: negros africanos, balcánicos, musulmanes, cristianos ortodoxos, sirios, persas. Esas moles son los famosos bunkers de la II Guerra Mundial. Han permanecido allí como tristes recuerdos de un pasado austríaco ligado al nazismo: Adolf Hitler nació en Austria y este país fue anexado en 1938, en el contexto del famoso Anschluss (unión o reunión, en lengua alemana), preanunciando lo peor: la invasión un año más tarde, de la invasión alemana a Polonia, un 1 de setiembre de 1939.

Uno de los bunkers con la cancha de básquet al lado.

Una cabina teléfonica en desuso, reciclada a pequeña librería para donar. Atrás, uno de los bunkers.

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DE LEYENDAS Y SUEÑOS (QUE SE CUMPLEN)

San Juan, 4 de junio de 2021.

Que la pasión en estas latitudes del globo terráqueo, tienen una estrecha relación con el deporte y sobre todo, el fútbol, no es ninguna novedad. Hasta el cine, como por ejemplo, “El secreto de sus ojos” (2009) reflejó dicha obsesión de los hombres pero también recientemente las mujeres, por la actividad del balompié. Sólo así se explica que anoche, una vez que el árbitro Pitana hiciera sonar su silbatazo final en la lejana y cuyana San Juan, aún violando la cuarentena argentina, hayan salido más chicas, adultas y hasta abuelas a las calles de Santa Fe, felices y embanderadas con los colores de sus amores, festejando el ansiado título, a la par de sus hombres o sin ellos. Tal vez, ese mismo encierro ha hecho más que evidente la necesidad de muchos hinchas de expresar de manera atípica, sus emociones inigualables, que de haber existido una situación más normal, también hubieran sido algo más atinadas, aún cuando es difícil imaginar qué se siente en la piel de un simpatizante, cuando su club gana por primera vez en su vida, una estrella.

Es que tuvieron que pasar 116 años y algunas semanas, para que un club del interior de la Argentina, cuyo rasgo esencial es el sufrimiento a lo largo de décadas, pero también la lealtad genuina de sus hinchas, pudiera gritar “Campeón” en un torneo nacional. Fue en un contexto anormal, sin público en los estadios sin localías válidas y tampoco, sin gente de manera masiva, celebrando en las calles, aunque como queda dicho, dicho factor se cumplió a medias por lo visto anoche, en muchos lugares de la Provincia de Santa Fe, no sólo la capital.

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ALVARO ALSOGARAY (HIJO): LA HISTORIA DE LA UCEDE

La evolución histórica de la Argentina está ligada indisolublemente a la del liberalismo. Como tradición, como doctrina o, recientemente, como identidad, ha ocupado un lugar central en la construcción institucional del país moderno, en la segunda mitad del siglo XIX hasta aproximadamente 1930.

Luego, el giro ideológico que tuvo la clase dirigente del país, del que ya nos hemos ocupado antes, nos condujo inexorablemente a un derrotero de decadencia y frustración que ya dura varias décadas. De modo paradojal, la pandemia ha reinstalado un enorme entusiasmo de la juventud por las ideas liberales, que tal vez, estén ligadas mejor que otras -o no-, al éxito del país, por lo que, de triunfar electoralmente en los próximos años, podrán augurarle un destino más venturoso, torciendo aquel rumbo.

Hubo un antecedente de esta tendencia, hace 3 décadas: el fenómeno de la UCEDE, partido político de centro-derecha liberal, liderado por el Ingeniero Alvaro Alsogaray (diputado nacional), cuyo hijo Alvaro Luis, hoy nos pudo entregar su testimonio de aquellos grandes momentos de la agrupación partidaria, que llegó a influir en el programa de gobierno, parcialmente aplicado por Carlos Saúl Menem.

Las generaciones jóvenes de la actualidad, entusiasmados por el fenómeno de Javier Milei, debieran conocer este “relato” para de esta manera, recoger aquella tradición, aprender de los errores del pasado y por qué no, intentar aplicarla con éxito en un futuro cercano.

SOREN KIERKEGAARD EN EL SIGLO XXI: “DRUK”

Cine danés. Druk” (traducida al español como “La otra ronda”). Estrenada en plena pandemia, en setiembre del fatídico 2020.

“¿Qué es la juventud? Un sueño. ¿Qué es el amor? El contenido de un sueño. Soren Kierkegaard”

Así empieza el film. Kierkegaard (1813-1855) se hallaba entre los últimos filósofos a leer y comprender en el buen Manual de Filosofía de Adolfo Carpio, que el Profesor Daniel Francisco Maquirriain (kantiano, como pocos), en mi querida Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), nos “exigía” estudiar. Lo vimos muy superficialmente aunque en el balance existencialista, con Martin Heidegger, tal vez por todo lo mediático que rodea a ésta, sobre todo, su simpatía por el nazismo y su amor por Hannah Arendt, le haya dado cierta ventaja a priori sobre el filósofo danés del siglo XIX y sea globalmente más conocido y referenciado que aquél.

Uno de mis grandes formadores universitarios

Hoy, en esta fase de mi vida, en la que me permito hacer balances y elaborar algunas hipótesis sobre la existencia humana, aún influido por la Ilustración Escocesa y Karl Popper, entre otros, la cosmovisión de Kierkegaard suena más que interesante.

Vamos al guión al menos, transitoriamente.

Un Profesor de #Historia, frustrado con sus alumnos que no aprenden porque “tienen sus cabezas atascadas en su #celular” (textual). Chicos y chicas que se acuestan literalmente sobre sus pupitres porque están “cansados del cansancio”, arrastrando sus cuerpos, sólo motivados en la vida, por ese líquido que se llama #alcohol. Los mismos, totalmente irrespetuosos, que almuerzan o cenan en la mesa, sin despegar su mirada de la #tablet. #Parejas que apenas se hablan, absolutamente indiferentes reprochándose mutuamente que ya no son a los 40 o 50 lo que eran a los 30 o 25. Hombres que de lo único que están pendientes, es de la orina de las mascotas, ya ni siquiera del deporte por #TV. #Mujeres que simulan ser “liberadas”, pero sólo ven y comentan entre ellas, series interminables y vulgares, de manera idiotizada.

No es #Argentina, aunque podría serlo en gran parte de su clase media y alta -las que quedan-.. Es #Dinamarca, Primer Mundo, #Europa. Escandinavia. Es todo el mundo, salvo alguna honrosa excepción, criticada por salirse del molde de la mediocridad, la chatura, la insoportable levedad o escasa “gloria”, con la que hoy se vive.

Los párrafos anteriores constituyen la trama inicial de la película. Habiendo tocado fondo, los cuatro profesores y amigos se atreven a “pegar un gran salto”. Influidos por la teoría del psiquiatra y escritor noruego Finn Skårderud, según quien -aunque felizmente tergiversado- el ser humano nace con un déficit de alcohol en la sangre, los intelectuales se animan a probar si es posible vivir bebiendo de día de manera normal, incluso en plena jornada laboral, hasta equilibrar y superar aquella ratio, autolimitándose sólo los fines de semana, para no caer en adicción. Según ellos, podía ser una manera de quebrar esa inercia descrita que los conducía a morir en vida.

Sin el ánimo de spoilear la película, todo proceso de novedad, lleva su secuencia inexorable de entusiasmo, auge y finalmente, caída, todo lo cual se verá en la película, aunque extrayendo como conclusión, que lejos de ser una apología del alcohol y mucho menos, del alcoholismo, venciendo a la angustia, el propio Director Thomas Vinterberg, quien ya nos había sorprendido con el estreno de “La Celebración” en 1998 nos advierte que en realidad, “en una primera fase, se bebe para tener una mejor versión de uno mismo” y “en una segunda etapa, se bebe para ser uno mismo de nuevo”.

Yo agregaría y como Kierkegaard, vinimos a este mundo, a amar, a nosotros mismos, a los demás, lo que hacemos, etc. Como él amó – y sufrió- a Regina Olsen.

Párrafo final: genial, como siempre para el actor protagonista, Mads Mikkelsen.

Frases célebres de Kierkegaard:

SANGRE DE MI SANGRE

Así se llama un capítulo de la temporada cuarta de la  galardonada serie “Outlander” que aquí ya hemos comentado anteriormente, sobre todo en su parte primera, que se desarrolla en mayoritariamente en continente europeo (Francia, Inglaterra y sobre todo, Escocia, entre 1743 y 1768). Pero ese capítulo citado ya forma parte de la segunda etapa del gran amor incondicional y eterno del highlander Jamie y la curandera Claire.

Producto de un naufragio que casi los ahoga, llegan a las costas de las colonias americanas -más exactamente, Carolina del Norte-, donde abandonando su pretensión de volver a la isla natal del primero, resuelven hacer una nueva vida, como muchos escoceses. Jamie se transformaría en un hacendado civilizado e indultado por los ingleses y ella, devendría en una agricultora y cirujana.

Casi toda la trama de este segunda parte, ya no los tiene a ellos como protagonistas, sino a sus hijos. Por un lado, William, el joven criado desde 1758, por Lord Grey, el aristócrata y ex oficial británico y gobernador de Jamaica, homosexual, enamorado perdidamente de Jamie, viudo de la amiga (Isobel) de la ex amante (Geneva) del escocés, quien había muerto apenas tras engendrar al “pequeño Willie”. Tras una década, Lord Grey junto a William, irían a visitar a Jamie y Claire en su cabaña del Cerro Fraser.

Por el otro, Brianna, queriendo evitar la muerte de sus padres, atravesaría las piedras en Craig Na Dun y luego de un azaroso viaje desde Europa a América, por fin los hallaría en Wilmington, tras un emotivo encuentro. El destino la uniría con su padre natural: ambos fueron violados, él por Jonathan Randall en prisión y ella por un pirata irlandés, Stephen Bonnet.

El nexo de ambos, tanto de William como Brianna, aún sin conocerse, aún teniendo padres adoptivos (Lord Grey como Jack Randall, respectivamente), cuya honestidad, bondad y desinterés, no puede ser puestas en duda, era la sangre. Ambos, a pesar de no verlo en más de dos décadas, no sólo compartían los aspectos biológicos de su padre, sino, lo más importante, tenían el carácter de Jamie: su terquedad, su nobleza, su orgullo, su frontalidad.

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REST IN PEACE “MARVELOUS” HAGLER

Brockton, Massachussetts. A world champion boxer with strong ties to Massachusetts has died at the age of 66.

“Marvelous” Marvin Hagler died unexpectedly at his New Hampshire home on Saturday, according to a statement from his wife, Kay.

Hagler, who began his boxing career in Brockton, reigned as the undisputed middleweight champion of the world from 1980 to 1987.

He lost the middleweight title to Sugar Ray Leonard via split decision in another fight that was considered an all-time classic. It would be Hagler’s last professional fight, as he retired in June 1988 at the age of 33.

Hagler finished his professional career with 62 wins, with 52 by knockout. He lost three fights, all by decision, and had two draws.

ASTOR PIAZZOLLA Y MAR DEL PLATA

Hace exactamente 100 años, un 11 de Marzo de 1921 nacía en Mar Del Plata, Provincia de Buenos Aires, Astor Pantaleón Piazzolla.

Como faro de la cultura nacional, hay ciertos hitos de su vida que nos llaman poderosamente la atención.

Tomando como fuente al sitio Efemérides Históricas, por ejemplo, siendo un niño de 11 años compuso su primer canción: en efecto, a pesar de su formación musical académica y clásica se inclinó por el tango y “La Catringa” fue el primer escalón.

En 1934 se produjo un segundo evento poco conocido: nada más ni nada menos que en Manhattan (New York), conoció a Carlos Gardel cuando le entregó un regalo de parte de su padre. Cuando “El Zorzal” vio que ese niño de 13 años manejaba el inglés, lo llevó para que lo ayudara en sus compras. Al regreso de su viaje lo hizo participar en la película “El día que me quieras” donde Astor personifica a un “canillita”. Aprovechando esta situación, Piazzolla le mostró sus dotes con el bandoneón, a lo que Gardel le expresó: “Pibe, el fuelle lo tocas bárbaro, pero el tango lo tocas como un gallego”.

Astor tocaba y componía para la orquesta de Aníbal Troilo cuando empezó a ser conocido, pero de inmediato, fue detestado por el mundo tradicional u ortodoxo del tango: no conseguía que ninguna radio difundiera sus temas, los clubes no lo contrataban, y ningún sello le quería editar un disco.

Prolífico e inquieto, no paraba de componer, estudió y tocó en Paris, volvió en 1955 pero como no lograba ser reconocido por sus pares viajó a Estados Unidos, estando allí, falleció su padre “Nonino” Piazzolla, un hecho que lo conduciría paradójicamente a la fama mundial. Porque Astor regresó a la Argentina y encerrado en su habitación compuso “Adiós Nonino”, su obra cumbre; él mismo dijo, “Intenté muchas veces componer algo mejor, y nunca pude”.Lo había logrado gracias a la emoción causada por la muerte de su propio padre.

Fue el ‘Maestro” Osvaldo Pugliese quien más creía en él y le abrió las puertas del tango de Buenos Aires: a partir de allí trabajó con todos: Edmundo Rivero, Jorge Sobral, Juan Carlos Copes, Horacio Malvicino, Horacio Ferrer, Amelita Baltar y Lalo Schifrin.

Distintas complicaciones circulatorias deterioraron su salud y finalmente, falleció el 4 de Julio de 1992 a los 71 años.

Podría decirse que Piazzolla fue resistido porque su “Ángel” asustaba las estructuras rígidas del tango, pero taladró los muros con su talento y se convirtió en uno de los más grandes exponentes de la música ciudadana. Ayudó a que el tango fuera conocido mundialmente: “Adiós Nonino” es el tango que mas versiones tiene, 170 a nivel mundial. Esa y otras obras, como ese himno a la libertad que es “Libertango”, no hacen más que emocionar a cualquier argentino de ley, que se halla fuera del país.

Esa música que supimos exportar y una muestra de ello, es el reconocimiento de #Rusia, a través de la Phonograph Jazz Band (dirigida por Serguei #Zhilin) desde el Svetlanov Hall de #Moscú. He aquí la versión rusa, del Maestro Zhilin, de esa genial pieza musical que fue “Libertango”:

Piazzolla es un marplatense genuino. El cumple años cada marzo y “la Ciudad Feliz” cumplió 147 eL 10 de febrero, con apenas un mes de diferencia. La ciudad se lo ha reconocido, colocándole el nombre de su Aeropuerto Internacional (desde 2008). Es la misma ciudad de Victoria Ocampo, Guillermo Vilas, Antonio Cabrales (fabricante de un riquísimo café), Alejandro Bustillo, Alfonsina Storni, entre otros tantos famosos, casi todos con una característica fundamental: la innovación, la originalidad, la creatividad, plantear la diferencia, pero siempre desde lo emocional, el sentimiento que penetre de tal modo de generar hasta lágrimas, si fuera necesario.

Precisamente, #Voltaire criticaba a los tenderos (ingleses) pero los #tenderos fundan ciudades. Por ejemplo, Mar del Plata, es una ciudad hija de la libertad civil y del esfuerzo de los emprendedores que vinieron o se reprodujeron de la mano de la Generación del Ochenta. #PeraltaRamos, que empezó como tendero en el negocio que contrató a la viuda de #Dorrego y sus hijas y ese vasco-francés llamado #PedroLuro, que le compró el saladero original al anterior. Saladero que funcionaba donde hoy viven mis tres hijos, sobre la misma Avenida Luro. #marplatenses por adopción.

La ciudad cuya belleza supera incluso a muchas villas turísticas de #Europa, emulando por ejemplo, a #Biarritz, donde la #aristocracia porteña veraneaba cuatro meses en el año. La ciudad donde ganó por primera vez en elecciones, el Partido Socialista. La ciudad que aún a pesar del deterioro causado por tantos años de desidia en la gestión pública de muchos Intendentes, sigue seduciendo a propios y extraños, incluso en el mundo.

FELIZ CENTENARIO ASTOR PIAZZOLLA Y POR MUCHOS MAS FELICES 147 A LA CIUDAD FELIZ DE LA ARGENTINA.

Me despido con fotos de la hermosa Villa Victoria, la casa de verano de Victoria Ocampo, que pude volver a visitar a fines de enero este año, tras una década de ausencia.

Digno final con la música de entrada y salida del tradicional programa televisivo de opinión política, “Tiempo Nuevo”, con Bernardo Neustadt y Mariano Grondona.

PD: el Embajador alemán en Argentina, Ulrich Sante, acaba de twittear que en Eiselfing, un pequeño pueblo campesino en Bavaria ­­hay un club de fans de Piazzolla cuya admiración por el músico es tan grande que hasta le pusieron su nombre a una calle: “Piazzollaweg“. He aquí el testimonio fotográfico.