SOBRE LAS RELACIONES RUSAS CON EL BRICS Y LATINOAMERICA

En el último mes de agosto, realizamos con Tamara Yevtschenko, quien coordina la Cátedra Rusa del IRI (UNLP), un nuevo zoom sobre los vínculos multivectoriales de la Rusia postsoviética. De paso, les informo que mi próximo libro tras “Putin Deconstruido” a presentar el jueves 19 en CABA, será sobre el BRICS.

Aquí comparto la grabación.

DOS NOTAS EN RT SOBRE LA GUERRA DE UCRANIA

En mayo y junio pasado, la cadena rusa me hizo un par de reportajes sobre la evolución de la guerra ucraniana. Aquí están los links correspondientes.

LA NOTA DE MAYO DE 2024

LA NOTA DE JUNIO DE 2024

Esta es una foto de mi visita a RT en abril de 2022, a dos meses de la “”Operación Militar Especial”.

RUSIA Y CHINA: UNA RELACION SOLIDA Y DURADERA?

Hace una semana, estuve presentando en la querida UNLP. una ponencia en un ambiente académico muy favorable a China, peo sobre Rusia. Aquí están varias de las ponencias expuestas, Pueden ver la mía en 15 minutos, entre las 8.45 y las 9.01.

 

ENTREVISTA DE CANAL PRORRUSO EN CABA

En mayo pasado, la entusiasta cineasta Silvana Jarmoluk, a quien conocí hace ya algunos años en las Jornadas Eslavas que organiza la Sociedad Argentina Dostoievski, me hizo un reportaje sobre Rusia y la política internacional en su programa radial propio (Pax Russika). He aquí, la versión original.

EDUCACION Y CIENCIA EN LA ERA MILEI

Hace un par de meses, tras las protestas universitarias masivas en todo el país, mi amigo y empresario, rosarino de nacimiento (formoseño por adopción) Marcelo Theyler, me reporteó para su novedoso emprendimiento “La Clase Digital”, acerca de las políticas (o “no políticas”) de Educación y Ciencia del gobierno de Javier Milei. Entre el minuto 20 y el 40, tienen aquí el extracto correspondiente de tal reportaje.

Ayer, con el mismo Marcelo tan viajero como yo, por fin, pudimos coincidir en nuestras agendas, compartiendo un emotivo reencuentro en el Bar El Federal, en el emblemático barrio de San Telmo, en CABA.

VICTIMAS NO IMPOLUTAS

Los de la “generación silver” estamos habituados a combinar nuestras vivencias diarias con el teléfono celular con la nostalgia por la famosa radio a transistores, donde uno movía el dial y se hallaba enfrentado a diversas frecuencias hasta ajustar y hallar la radio AM o FM preferida. Esas frecuencias eran bandas de ondas electromagnéticas que habilitaba determinados canales y no otros. Esos márgenes o anchuras no tangibles podrían asemejarse a las morales. No es lo mismo la moral para un político que para un mecánico o verdulero o incluso, médico.

Podríamos hablar de dimensiones morales. Alberto Fernández y Fabiola Yáñez, los protagonistas de un verdadero affaire que llamativamente, recién se desnuda literal y figurativamente ahora, se mueven en una dimensión moral diferente a la del resto de los argentinos, ciudadanos comunes. Sencillamente porque haber disfrutado de poder e impunidad, donde las ambiciones y vanidades pueden coronarse por una vía más rápida y tal vez, breve o duradera, según corresponda, los aleja del resto de los mortales. Por lo tanto, evaluar situaciones de violencia de género o de victimización de uno de los dos, no me parece sensato ni realista. Dicho de otro modo, a las víctimas socialmente, las debemos considerar impolutas y en tal caso, a Fabiola, sus declaraciones y ambiciones expuestas, la manchan más allá que uno condene a priori la violencia que recibió de quien ella misma en su momento, supo muy bien quien y cómo era. De Alberto Fernández, por cierto, huelgan los comentarios.

Por lo tanto, que ambos se cocinen en su propia salsa pero por favor, que el gobierno de Milei -colateralmente muy beneficiado por esta situación- no permita cubrir más erogaciones fiscales en custodias y demás detalles para esta “pareja despareja”, con el dinero de los argentinos. Por el sólo recuerdo de los muertos y encerrados en “la cuarentena cavernícola”, no nos merecen. 

VICTORIA VILLARRUEL NO SIENTE LASTIMA

TRES VIDEOS CORTITOS DEL ULTIMO TRIMESTRE

Tras la aprobación de la Ley Bases e fin de junio, el gobierno de Milei empezó a tener una fuerte convulsión cambiaria, acelerando la presión devaluatoria del dólar.

En medio de las tormentas económicas generadas a partir de la suba del dólar, empezó el ilusionismo de algunos personeros afines al gobierno, como el ex Vicepresidente de Menem, Carlos Ruckauf.

Por ‘ultimo, esta semana, la empresa gigantesca y globalizada Google, seguramente admirada por Milei, fue sancionada por la justicia de Estados Unidos. He aquí una minirreflexión acerca del tema.

“EL MUERTO SE ASUSTA DEL DEGOLLADO”

Este fin de semana, una noticia sacudió al mundo empresario nacional en esta era Milei. Un conglomerado de 40 bancos que operan con la billetera electrónica MODO, denunció a la empresa MERCADO LIBRE de Marcos Galperín, uno de los empresarios “mimados” por el Presidente, por prácticas abusivas de “posición dominante”. Esta puja en realidad, es novedosa en este país pero no lo es en el mundo. La guerra ya declarada entre el sector financiero y la industria de las tecnológicas -hoy conocidas como “”fintech”-, por quien dominará el manejo y/o circulación del dinero en las próximas décadas, empezó en la propia Estados Unidos, ya hace algunos años, agudizándose durante y tras la pandemia.

Paradójico que Milei considere como aliados a ambos subsectores, cuando  tal vez tenga que definirse por uno de los dos, más temprano de lo previsto.

Es la nueva dinámica del capitalismo global. No hay lugar para los dos bajo el sol. Sólo uno podrá imponerse.

UNO MAS (Y VAN…)

Esta semana, Javier Milei viajó nuevamente al exterior, particularmente Estados Unidos, pronto lo hará a España, aunque con finalidades que poco o nada tienen relación con su gestión de gobierno. Volvieron así las hipótesis periodísticas en torno a cuan cómodo o comprometido se halla con su gobierno. Ya sea porque puntualmente la marcha universitaria del martes 23 de abril le puso un límite, o porque las presiones y locura que supone gobernar un país tan bipolar y ciclotímico como la Argentina, terminan siendo insoportables, el flamante Presidente no parece encontrar el sosiego que ansía tener por ejemplo, cuando se retire: “estar con sus seres de cuatro patas”. Al mismo tiempo, sí parece “estar en su salsa” cuando da conferencias anodinas sobre sus formas (abstractas) de entender la economía o aspectos morales como la bondad o la virtud empresaria, que le preocupan tanto. Mientras tanto, el 63 % de los cargos estatales no han sido ocupados, las reuniones de gabinete las preside su hermana Karina y el consenso pragmático logrado con vocación artesanal por su Ministro del Interior, el “todoterreno” Guillermo Francos. Es decir, Milei no gobierna. Tampoco le interesa.

Podría decirse que su propia filosofía anarco-capitalista, en contra de esa “organización criminal” -como él mismo la denomina- que es el Estado, influye para respaldar aquel comportamiento. Pero si fuera así, hubiera actuado desde el primer día en tal sentido. Quien tiene la vocación y convicción verdaderas para aniquilar al Estado lo hace desde el primer día, actuando en consecuencia, no sólo para destruir o bloquear sino para forjar algo nuevo o inédito. No alguien que se convierte en “pragmático” tras 4 meses, ni siquiera cuenta con una sóla ley en ese período o quien se dedica obsesivamente a multiplicar “likes” en la red social “X” o busca con desenfreno, “reconocimiento internacional”, aún a costa de papelones por sus balbuceos en sus entrevistas con periodistas no guionados.

Pero mirando hacia atrás, Milei no es la excepción y eso es lo preocupante. A la hora de revisar el pasado, la lista de Presidentes que no se sienten a gusto, “presidiendo”, termina siendo larga. Alberto Fernández estuvo en la Casa Rosada, porque lo instaló tal vez, contra su voluntad, Cristina Fernández. Macri pasó por allí empujado por su propio desafío a Franco, su padre. CFK le dio el gusto a su marido Néstor y éste a Duhalde, siendo tal vez el último Presidente que realmente “disfrutó el poder”, aunque éste lo llevó a su propia muerte.

En un régimen presidencialista, Presidentes que no quieren presidir sinceramente, afecta el propio pilar básico de aquél. Para una sociedad que necesita ser gobernada, como solía decir Manuel Mora y Araujo, es un gran detalle. Sobre todo, si no se pretende seguir perdiendo tiempo valioso que consuma generaciones enteras y se elucubren las más varias teorías o estrategias para sacárnoslos de encima antes de que terminen sus respectivos mandatos (sin pena ni gloria).